Aprende a preparar una lonchera saludable

En esta época de regreso a clases conviene que los padres tomen en cuenta la importancia de la alimentación de los niños. El proceso de aprendizaje debe estar acompañado de una ingesta de nutrientes adecuada. Una dieta balanceada favorece el desempeño escolar.

Ana Adames, médico especialista en nutrición clínica de la Universidad Central de Venezuela (UCV) y de la Universidad Simón Bolívar (USB), conversó con El Nacional  y comentó que es común en los planteles educativos que haya niños mal nutridos, lo que afecta directamente el rendimiento académico de estos. «La deficiencia de alimentos funcionales y fundamentales pueden producir anemia por deficiencia de hierro, bajo rendimiento escolar por poca concentración, disminución de la agudeza visual por consumo de alimentos con bajo contenido de vitamina A o retinoides entre otras alteraciones», expresó Adames.

Para lograr un óptimo proceso de aprendizaje, que requiere de atención y concentración, el cuerpo y el cerebro deben recibir nutrientes en cantidades adecuadas. Es decir, una alimentación balanceada que incluya carbohidratos, proteínas y grasas saludables (macronutrientes) y vitaminas y minerales (micronutrientes), de lo contrario se verá afectada la experiencia de aprendizaje.

El momento adecuado para que el niño desayune puede variar dependiendo de la dinámica familiar y del apetito del infante. Adames comentó al respecto: «Sugiero que nunca inicie su actividad escolar con el estómago vacío.  Recomiendo a la mayoría de mis pacientes que desayunen en casa o que realicen un pre desayuno como por ejemplo yogurt con frutas, un vaso de leche con frutas o galletas», expresó la doctora.

Grisell Ortiz Lovera, médico cirujano de la UCV y especialista en nutrición clínica de la USB, resaltó la importancia de ingerir el desayuno antes de salir de la casa. Explicó que después de dormir toda la noche, el cuerpo presenta de 9 a 10 horas de ayuno, y si el niño espera al recreo para desayunar, no tendrá la energía necesaria para concentrarse y aprender.»Vamos a tener todo lo contrario, niños bostezando, distraídos, somnolientos, hambrientos», expuso Ortiz. De igual manera, advirtió que los padres deben evitar que los niños coman dulces o chucherías, ya que solo contienen Kcal vacías, es decir, que no aportan nutrientes, pero sí engordan.

Consejos para preparar una lonchera «20 puntos»

-En la medida que sea necesario, las preparaciones deben ser enviadas en envases térmicos que conserven la temperatura adecuada hasta el momento de consumirlas. En caso de no contar con envases apropiados, se sugiere congelar la bebida para que mantenga el frío en la lonchera.

 -La lonchera debe incluir diariamente al menos una ración de todas las familias de alimentos:  leche o yogurt, vegetales, frutas, panes o almidones, proteínas o sustitutos de carne y grasas naturales.

 -Es importante cuidar la cantidad de sal y azúcar utilizada en la preparación de la comida de los niños.

-Hacer no solo platos saludables, sino divertidos: poner color y cortar en formas recreativas.

 Ejemplos de loncheras sobresalientes

Para quienes envían el desayuno al colegio, la lonchera puede contener:

– Opción 1:  medio vaso de yogurt de larga duración (lácteo) dentro de un envase térmico, acompañado con frutas en trozos + arepa asada rellena con ensalada de atún con cebolla, tomate y pimentón.  De merienda: cotufas y un vaso de jugo de naranja, parchita o tres en uno (naranja, zanahoria y remolacha) que contiene gran cantidad de nutrientes.

 -Opción 2:  un vaso de leche + sándwich de pan integral o pan blanco relleno con una rebanada de queso + una rebanada de jamón y alfalfa. De merienda: frutas en trozos (lechosa, patilla o melón) y en una bolsa aproximadamente 30 gramos o un puño de frutos secos como maní, nueces o almendras garrapiñadas.

La especialista en nutrición clínica, Ana Adames, dijo que si el niño desayuna en casa, la lonchera debe contener, de igual manera, todas las familias de alimentos. Por ejemplo, un vaso de jugo de frutas, un paquete de galletas, trocitos de queso, palitos de zanahoria o celery en vez de enviar papitas chips o ponquecitos a diario. «Una manera práctica de incluir alimentos ricos en nutrientes y sabrosos, es la preparación de panquecas de avena con huevo y rellenas con mermelada de fruta y queso, las cuales frías o calientes son deliciosas», expresó la especialista.

Si su hijo es de los que usualmente come cereales, estos pueden ser mezclados con frutos secos como maní, nueces, avellanas o almendras acompañados de un vaso de yogurt. 

Resolución en Gaceta Oficial

Medidas oficiales relacionadas a la alimentación de los estudiantes

El Ministerio de Educación estableció el 4 de septiembre de 2015, en la resolución Nº 080 publicada en  Gaceta Oficial  Nº 40739, la prohibición de la venta de café, té y bebidas energéticas en las cantinas escolares. De igual manera, restringió el uso excesivo de sal y aceites vegetales, y el empleo de cubitos y sazonadores en los alimentos.

También obliga a los prestadores del servicio de cantinas escolares a vender alimentos y bebidas preparados conforme a las orientaciones del Instituto Nacional de Nutrición, así como a colocar en un lugar visible la lista de los alimentos permitidos, recomendados y prohibidos en el plantel. El Instituto Nacional de Nutrición reiteró en el órgano oficial que tampoco podrán venderse en esos establecimientos productos como bebidas gaseosas, golosinas, chupetas, chocolates y caramelos.

La doctora Grisell Ortiz Lovera argumentó a El Nacional  su acuerdo con la medida oficial, ya que «es mejor fomentar los buenos hábitos desde la infancia». Indicó que los refrescos tienen un carga de azúcar muy alta, entre otros químicos que crean adicción y pueden ocasionar serios problemas de salud como obesidad, diabetes, desmineralización ósea, daños a la mucosa gástrica, entre otros.

Además, expuso que las bebidas energizantes están hechas para deportistas de alta competencia que requieran reponer rápidamente los electrolitos perdidos a través de la sudoración, en el caso de los niños es mejor ofrecerles alguna fruta y agua. Con respecto a las chucherías mencionadas, indicó que tienen alto contenido de sal, que a su vez incita al consumo de bebidas azucaradas, por lo que crean adicción y un ciclo vicioso en contra de una alimentación balanceada y sana, necesaria en todas las edades y más durante el proceso de crecimiento y desarrollo.

En conclusión, los padres de los infantes, así como los maestros y los familiares, deben ser garantes de una alimentación adecuada que favorezca el rendimiento escolar de los niños.

La doctora Ana Adames, consulta en el Centro Comercial Terras Plaza, piso 7. Terrazas de Club Hípico, municipio Baruta, Caracas. Su cuenta en las redes sociales Twitter e Instagram: @DoctoraAdames.

La doctora Grisell Ortiz, consulta en la Clínica Piedra Azul. Piso 2, consultorio 217. Sector Piedra Azul, municipio Baruta, Caracas. Su cuenta de Twitter: @grinutri.