El yoga es una practica que conecta al cuerpo, la respiración y la mente. Durante ella se usan técnicas de respiración, postura físicas y meditación para mejorar la salud en general. El yoga se desarrollo hace miles de años como una practica espiritual, aunque actualmente tiene la misma connotación, las personas la usan como una práctica para la relajación y el ejercicio.
Beneficios del yoga
El yoga posee varios beneficios además de ayudar en la mejora en el estado físico en general, mejorar la postura y aumentar la flexibilidad. Estos son:
- Reducir la presión arterial y la frecuencia cardiaca.
- Ayuda en la relajación.
- Mejorar la confianza en sí mismo.
- Reduce el estrés.
- Mejora la coordinación.
- Mejora la concentración.
- Ayuda a dormir mejor.
- Ayuda en la digestión.
El yoga puede participar de manera positiva en las siguientes afecciones:
- La depresión.
- La ansiedad.
- El dolor de espalda.
Posturas de yoga para aumentar la flexibilidad
Es natural que el cuerpo pierda flexibilidad con el paso del tiempo, sobre todo si se vive en sedentarismo. Algunos ejercicios y posturas de yoga pueden ayudar a restaurar la flexibilidad perdida y, además de esta forma comenzar un estilo de vida mas activo. Con estas posturas se pueden además prevenir lesiones al practicar deportes o hacer movimientos inesperados, puede mejorar la postura incluso.
Ananda Balasana, o postura del bebé feliz
Esta asana es excelente para trabajar la apertura de las caderas. Esta es una postura ideal para principiantes de esta disciplina y se dice que se tiene dominada desde bebés. Tiene funciones como la relajación, precalentamiento e incluso puede ayudar a conciliar el sueño. Esta es un postura muy divertida y fácil de hacer.
Sobre un lugar cómodo, preferiblemente una colchoneta, debes colocarte sobre tu espalda boca arriba. Con esta posición, vas a elevar las rodillas a tu pecho y abriendo estas ligeramente vas a tomar la parte exterior de los pies con tus manos; esto puede variar dependiendo de tu flexibilidad ya que puedes sujetar tus pies desde la parte exterior o interior. La condición de esta postura es que las rodillas y los tobillos deben formar un ángulo de 90°. Debes mantener los pies activos. Sostén la postura por 60 segundos.
Baddha Konasana, o postura de la mariposa
Para realizar esta postura debes sentarte con las piernas estiradas y la espalda recta. Luego, inclina las rodillas y mueve los pies hacia la parte interior juntando las plantas. Las rodillas deberán bajar al piso tanto como puedas. Y eso es básicamente todo, recuerda no curvar la espalda y mantener la posición de 7 a 10 respiraciones.
Esta postura funciona como estimulación para los órganos interiores de la zona abdominal, circulación en el área pélvica, abre las caderas y el pecho además de zonas que suele permanecer “cerradas” tales como la ingle, abductores y la parte baja del abdomen.
Bhujangasana o postura de la cobra
Con esta postura trabajaras la apertura y flexibilidad del pecho, la espalda y hombres, zonas donde se suele acumular la tensión. Incluso puede ayudar a combatir problemas respiratorios y aliviar síntomas de estrés y ansiedad.
Recuéstate en el suelo, boca abajo y con el cuerpo bien estirado. Coloca tus palmas abiertas sobre el suelo y a la altura de los hombros; luego estira los brazos y levanta el pecho sin despegar el pubis del piso y llevando los hombros hacia atrás.
Uttanasana, o postura de la pinza
Esta profunda inclinación es excelente para trabajar la flexibilidad de la parte posterior del cuerpo, desde la espalda hasta la pantorrilla. Suele funcionar como un calentamiento y ayuda en el tratamiento del estrés y la depresión, puede incluso aliviar los cólicos y dolores de cabeza.
Esta postura puede realizarse con los pies separados a la altura de las caderas o juntos. Los pies deben estar apoyados firmemente en el suelo con los dedos bien separados. Exhalando vas a flexionar el tronco adelante y colocar las manos en las piernas, de manera de apoyo. Si eres principiante o no tienes buena flexibilidad no podrás bajar demasiado. Si formas parte de esta grupo, no hará falta que estires demasiado las piernas, puedes incluso flexionarlas un poco y a medida que tu flexibilidad aumente podrás bajar más.
Ardha Kapotasana o postura de la media paloma
Con esta posturas no solo vas a trabajar la flexibilidad de las piernas, sino también la de la cadera y su apertura, así como también la de la espalda. Puedes llegar a esta posición de manera más fácil mediante la postura del perro, una vez estés en esta vas a llevar una pierna adelante y la vas a colocar entre tus manos, apoyaras la rodilla, luego la pierna y el pie en el suelo flexionándola frente a ti. La otra pierna la dejaras atrás.