El Comercio / Adriana Bucheli , comunicadora social, trabajó en un banco como cajera durante tres años y recuerda como era su cotidianidad : «en un principio, nos dejaban usar los zapatos a nuestro gusto, mientras sean negros y de cuero estaba bien. Pero luego nos cambiaron el uniforme «.
El nuevo traje incluía zapatos de taco : «altísimos y bastante incómodos». Entonces, Bucheli pidió autorización para usar zapatos más bajos, pues años atrás le habían prohibido usar de tacones altos por problemas de la espalda .
En su trabajo, le exigieron una certificación médica de un traumatólogo del IESS. Nunca consiguió la cita, así que optó por cargar zapatos bajos para cambiarse antes de entrar y tan pronto salía del trabajo. Además, tenía un par de zapatos de taco escondidos debajo del escritorio para cambiarse cuando un jefe estaba cerca.
Las normas de vestimenta en el trabajo se han convertido en un tema muy hablado en las últimas semanas. Primero, estuvo la aparición de Julia Roberts descalza en la alfombra de Cannes.
La actriz comentó después que le pareció muy incómodo subir con tacos altos las escaleras para el ingreso al evento, así que se los quitó. Este acto se vio como una respuesta a las polémicas en las que se ha visto envuelto Cannes desde el año anterior, por expulsar a mujeres que no cumplían con el protocolo : llevar tacos.
Además, la denuncia en redes sociales de una mujer británica se volvió viral; en ella se revelaba que fue despedida de su trabajo por usar zapatos planos. Nicola Thorp , de 27 años, cuestionó a sus empleadores sobre cómo zapatos incómodos podrían influir en la calidad de su trabajo.
Caso similares han ido flexibilizando los códigos de vestimenta a lo largo de los años. Así lo comenta Cinthia Guato, diseñadora de indumentaria, que ha elaborado uniformes para CNT y Tame. «Se pone mucho énfasis en la seguridad de los empleados, en la comodidad y se respetan los casos de quienes no pueden usar cierta indumentaria «, asegura.
Alejandra Uzcátegui , asesora de imagen empresarial, concuerda. Sin embargo, asegura que el planteamiento de uniformes también depende del tipo de negocio .
Bancos, farmacéuticas, compañías de seguros, empresas, cuyo quehacer está enfocado en el trato con el cliente externo, requieren por lo general el uso de tacones a sus dependientas.
Si bien hay muchas mujeres que prefieren los tacones, Guato y Uzcátegui recomiendan a las empresas mayor flexibilidad con las elecciones de las empleadas , pues la incomodidad sí puede afectar el desempeño laboral.
Por otro lado, el médico traumatólogo Jorge Torres dice que cada caso es distinto, por lo que hay mujeres a las que se les recomienda usar tacos magnolia de unos 5 cm y hay otras a las que se les sugiere el uso de zapatos con un taco de unos 2 cm. Eso sí, el uso constante de zapatos planos o con más de 10 cm de taco no son recomendables para nadie.
Los zapatos no deben superar los cuatro centímetros de alto Video Cuando lo ‘fashion’ es perjudicial para la salud