Un grupo de científicos ha identificado dos proteínas que ayudan a entender la efectividad de los tratamientos contra el virus del sida , según revelan dos estudios publicados por la revista británica “Nature”.
En ambos trabajos, desarrollados por separado, los expertos explican el funcionamiento del mecanismo por el que la proteína vírica Nef desencadena la formación en el organismo de anticuerpos del VIH-1, la cepa más común y patogénica del virus de la inmunodeficiencia humana (sida).
“Se sabía que Nef sirve para mejorar la ineficacia de las partículas víricas del VIH, pero los mecanismos subyacentes no estaban claros”, recuerda el comunicado difundido por “Nature”.
Durante los últimos años, la investigación con las proteínas Nef, Tat y Rev ha permitido diseñar terapias capaces de retrasar el avance del virus , pero aún existe desconocimiento sobre los mecanismos de acción de otras proteínas esenciales para lograr erradicar la enfermedad.
En este sentido, estos dos nuevos estudios, siguiendo enfoques diferentes, han hallado dos proteínas de membrana, la SERINC3 y SERINC5 , que actúan como “factores de restricción” del VIH-1, es decir, como proteínas capaces de contrarrestar la reproducción del virus.
Cuando está presente la proteína Nef, se inhiben tanto SERINC3 como SERINC5 pero, en su ausencia, esas proteínas se incorporan a las partículas víricas y bloquean la infección de VIH-1.
Uno de los estudios, dirigido por el científico Massimo Pizzato, de la Universidad de Trento (Italia), analizó la expresión genética en 31 líneas de células humanas para identificar a SERINC5 y SERINC3 como inhibidores del VIH-1.
El otro trabajo, encabezado por Heinrich Göttlinger, de la Escuela de Medicina de la Universidad de Massachusetts (EEUU), comparó la composición proteica de partículas de “VIH normal” con la de un “virus con deficiencia Nef” y llegó a detectar la existencia de “los mismos factores” de restricción.
“Las proteínas demuestran que tienen el mismo efecto antiviral en otros retrovirus, como en el Virus de la Leucemia Murina, lo que sugiere que desempeñan un papel importante en la inmunidad antiviral innata”, señala el documento.
En particular, ambos autores sugieren que el “factor celular antiviral SERINC5″ podría ser usado como un “gen terapéutico contra el VIH-1″.
Fuente: EFE