El Nacional / En las mujeres, el hecho de ser diagnosticada con Artritis Reumatoide no se considera ninguna limitante para concebir. En este sentido, el doctor Marcos Cruces, especialista en reumatología, explicó que las pacientes con esta condición, sí pueden quedar embarazadas, siempre y cuando estén bien controladas de su enfermedad, ya que antes se deben suspender los medicamentos que pueden afectar el desarrollo normal del embarazo y ajustar el tratamiento que van a recibir durante el mismo.
«Como hay tratamientos que pueden afectar y producir abortos o malformaciones, las mujeres en edad fértil deben acudir a consulta de planificación familiar para evitar quedar embarazadas mientras estén medicadas con este tipo de fármacos. En caso de planificar un embarazo consultar con el reumatólogo para tomar las previsiones del caso», advirtió el galeno.
Según el especialista, si el embarazo no fue planificado, la paciente debe ir a su control obstétrico conjuntamente con el reumatólogo para evaluar el estado de la madre y el desarrollo del embarazo, y adecuar el tratamiento en caso de ser necesario.
En cuanto a la parte genética de esta patología, el doctor Cruces señaló que las personas que tienen un familiar con Artritis Reumatoide pueden tener mayor riesgo de desarrollar la enfermedad por factores genéticos. Sin embargo, actualmente no está indicado hacer estudios ni evaluaciones a los hijos asintomáticos de pacientes con esta condición, pero en caso de presentar algún síntoma osteomuscular, es importante consultar con un reumatólogo.
Cuidados adicionales en el embarazo
De acuerdo con el doctor Cruces, tener Artritis Reumatoides no implica un embarazo de alto riesgo, ya que dicha patología no afecta al desarrollo de la gestación. «Si se planificó y se suspendieron previamente los tratamientos que pueden afectar al feto, el embarazo tendrá un riesgo de complicaciones similar a las que no sufren de Artritis Reumatoide, pero la probabilidad de ameritar cesárea si pudiese aumentar en caso de afectación de las articulaciones de las caderas», acotó.
Algunos de los cuidados adicionales que pudiese necesitar la paciente van a depender mucho del daño articular previo al embarazo, por lo que deberá tomar medidas para evitar caídas, aumento de peso adicional al que se produce normalmente durante el embarazo que pudiese producir dolor en miembros inferiores y columna lumbar. Sin embargo, en líneas generales, debe cumplir las recomendaciones de las pacientes embarazadas sin Artritis Reumatoide.
En el caso que la paciente presente una crisis durante su embarazo, el doctor Cruces afirmó que el reumatólogo indicará el tratamiento más adecuado, según el grado de la inflamación articular : «Se pueden indicar dosis bajas de esteroides que no pasan la barrera placentaria y no producen daño al feto. Además, hay otros tratamientos que se pueden usar durante el embarazo sin mayor riesgo para el desarrollo del bebé».
Para finalizar, el especialista en reumatología precisó que, generalmente, durante el embarazo gracias a los cambios hormonales, entre otros factores, se produce mejoría de los síntomas de la enfermedad, lo cual favorece que las pacientes no requieran tratamiento para la Artritis Reumatoide durante el mismo y las crisis que ameriten tratamiento sean poco frecuentes y con menor grado de inflamación articular. «Después del parto, pueden volver a presentar recaídas de la enfermedad con un grado de inflamación similar al que tenían previo al embarazo. En caso de ameritar tratamiento durante la lactancia, también se debe tomar en consideración que hay medicamentos contraindicados durante la misma, por lo cual deben ser indicados estrictamente por el médico tratante», concluyó el doctor Cruces.
Información: Nota de Prensa