El Informador / CIUDAD DE MÉXICO (09/MAY/2016).- La alimentación basada en proteínas de valor biológico, presentes en la leche, garantizan nutrientes necesarios para las mujeres durante el embarazo, aseguró la Cámara Nacional de Industriales de la Leche (Canilec).
Indicó que el consumo diario de tres porciones de leche o productos lácteos, como los quesos o yogurts, aportan cerca del 80 por ciento de los requerimientos de calcio necesarios para la maternidad, según la Federación Panamericana de Lechería.
Lo anterior, dijo, toma mayor importancia si se toma en cuenta que, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT), la mitad de las mujeres embarazadas en México presenta deficiencias nutricionales, como la anemia, la cual aumenta el riesgo de partos prematuros y bajo peso en recién nacidos.
En ese sentido, el presidente de la Canilec, Juan Carlos Pardo, aseguró que la leche y sus derivados son excelente fuente de calcio para las mujeres durante la gestación.
«La leche es un alimento básico para la nutrición humana y la recomendación de ingesta mínima de calcio al día durante el embarazo es difícil de alcanzar, a menos que se incremente también el consumo de alimentos, como los lácteos», explicó.
Las proyecciones indican que siete de cada 10 mujeres en México son o serán madres, quienes necesitan incrementar en 20 por ciento su alimentación durante el embarazo, pero sobre todo cuidar la calidad nutricional de los alimentos que consumen.
«La leche es un alimento con mucho valor proteínico y rico en calcio, magnesio, selenio, retinol, riboflavina, vitamina B12 y ácido pantoténico -o vitamina B5. Todos ellos son fundamentales durante uno de los estados fisiológicos de más altos requerimientos de nutrientes: el embarazo», reforzó Pardo.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), actualmente 15 por ciento de las mujeres embarazadas a nivel mundial presentan alguna complicación mortal que requiere atención médica especializada.
«Es por esta razón es que una nutrición adecuada es importante en el embarazo para reducir riesgos. Estudios demuestran que el consumo de lácteos reduce el peligro de hipertensión y preclamsia en el embarazo, así como de hipertensión durante la niñez y edad adulta», concluyó el presidente de la cámara.