El Financiero /
Con motivo del Día Mundial sin Tabaco , la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó un informe en el que evalúa el coste sanitario y económico del tabaco y, por primera vez, su impacto medioambiental.
En el reporte titulado «El tabaco y su impacto medioambiental: una visión de conjunto», el primero sobre los efectos de este producto en la naturaleza, se dan algunos datos reveladores.
Los residuos de tabaco contienen más de 7 mil sustancias químicas tóxicas que envenenan el medio ambiente , algunas de ellas cancerígenas para el ser humano.
Además en el humo de tabaco se liberan miles de toneladas de productos cancerígenos para el ser humano, sustancias tóxicas y gases de efecto invernadero, y los residuos de los productos de tabaco son el tipo de basura más numeroso.
Cerca de 10 mil millones de los 15 mil millones de cigarrillos vendidos diariamente en el mundo se desechan al medio ambiente. Las colillas de cigarrillo representan entre el 30 y el 40 por ciento de los objetos recogidos en las actividades de limpieza costera y urbana.
Según la OMS, el tabaco podría provocar en el siglo 21 en total hasta mil millones de muertes en todo el mundo.
Para acabar con esta plaga la OMS aboga por «medidas fuertes», como la prohibición de la publicidad y el marketing, de su venta en interiores y lugares de trabajo, así como el aumento del precio del tabaco y de las tasas.
Tal como lo explica el doctor Oleg Chestnov, subdirector general de la OMS para Enfermedades No Transmisibles y Salud Mental, señala: «Muchos gobiernos están tomando medidas contra el tabaco , desde la prohibición de su publicidad y comercialización hasta la introducción del empaquetado neutro y la prohibición de fumar en los espacios públicos y los lugares de trabajo.
«No obstante, una medida de lucha antitabquismo menos utilizada que resulta muy eficaz es la aplicación de políticas tributarias y de precios, que los países pueden aplicar para satisfacer sus necesidades de desarrollo».
La OMS alertó también de que su consumo mata a más de siete millones de personas por año en todo el mundo.
«El tabaco es una amenaza para todos. Agrava la pobreza, reduce la productividad económica , afecta negativamente a la elección de los alimentos que se consumen en los hogares y contamina el aire de interiores», declaró Margaret Chan , directora general del organismo.
El consumo de tabaco se lleva la vida de más de 7 millones de personas cada año -contra 4 millones a principios del siglo 21- y cuesta a los hogares y gobiernos más de 1.4 billones de dólares en gastos sanitarios y pérdida de productividad, según la OMS .
Actualmente, el t abaco -principal causa evitable de enfermedades no transmisibles- mata a la mitad de los que lo consumen.
El tabaquismo afecta principalmente a personas pobres y constituye una causa importante de disparidades en salud entre ricos y pobres, según la OMS.