El sueño es la manera más fácil, cómoda y agradable de mejorar tus resultados.
Y es que no hace falta que te esfuerces lo más mínimo para que tu rendimiento mejore como por arte de magia, el secreto está en dormir. Eso sí, dormir bien, con calidad, respetando sus fases y las horas necesarias. Así que si quieres levantar más peso, correr más tiempo o más rápido o mejorar cualquier marca sea cual sea el deporte que practiques, será fundamental que pilles el sobre con ganas.
FASES
Tres fases se suceden cada 90-120 minutos. Tras el sueño ligero viene la fase REM (Rapid Eye Movement), cuya finalidad es “resetear” principalmente las aptitudes mentales. Cuando esta fase funciona correctamente te encuentras renovado y tu capacidad de concentración funciona a tope. Después empieza el sueño profundo, donde se liberan hormonas como la testosterona o la hormona del crecimiento, encargadas de estimular la síntesis proteica que permitirá al organismo una mayor regeneración de los tejidos afectados durante el entrenamiento.
TIMING
Tan importante como las horas de sueño es cuando sucedan. El organismo se rige por los llamados ciclos circadianos que pueden afectar a la secreción hormonal del sueño profundo. Podemos adaptarnos a un horario fuera de lo habitual pero necesitamos regularidad. Si tus ocho horas no son las habituales, al menos intenta que siempre sean las mismas.
LA FALTA DE SUEÑO AFECTA AL RENDIMIENTO
Disminuye la capacidad para alimentarse y entrenar correctamente al no disponer de la capacidad de concentración necesarias. Cuando el cerebro está agotado genera la necesidad de ingerir alimentos ricos en azúcar. Ésta es la razón por la que estados de alta fatiga física o psicológica generan la necesidad, por todos conocida, de comer dulces, amenazando esos resultados que tanto sacrificio te están costando.
Con información de: menshealth.es