Version Final / El envejecimiento de los seres humanos empieza alrededor de la tercera década de vida, según la raza, la actividad hormonal y la genética.
Éste es un proceso biológico que todos tenemos que aceptar porque, al llegar a determinada etapa, se convierte en parte de nuestra vida.
Sin embargo, existe otro tipo de envejecimiento que sí puede evitarse y minimizarse con la práctica continua de algunos hábitos.
Se produce por la reacción ante múltiples factores externos como lo son el clima, las toxinas del ambiente, los hábitos alimenticios o el estrés, entre otros.
El portal mejor con Salud explicó que como consecuencia, los tejidos de la piel se ven afectados y tienden a desarrollar arrugas, manchas y otros signos de la edad.
Afortunadamente, existen muchas medidas de prevención y cuidado que podemos practicar cada día para no tener que padecerlos.
1. Duerme bien
Aunque lo ignoramos todo el tiempo, durante el periodo de descanso se da un proceso de regeneración de la piel que es determinante para mantenerla joven.
En este lapso las células se activan y reparan los daños que se padecen a causa de los radicales libres y las toxinas del ambiente.
Por lo tanto, un sueño de mínimo 7 horas es fundamental para mantener la piel saludable y libre de imperfecciones.
2. Ingiere alimentos antioxidantes El consumo de alimentos antioxidantes todos los días es una de las medidas más efectivas contra los signos de la edad y las enfermedades.
Estas sustancias, presentes en su mayoría en frutas y verduras, inhiben el efecto negativo de los radicales libres y reparan las células dañadas.
Algunos de los recomendados son:
La uva La granada El kiwi Los arándanos La banana Los vegetales de hojas verdes Los frutos secos 3. Evita el tabaco
Las mujeres que fuman no solo tienen más riesgo de padecer cáncer, sino que presentan reacciones a nivel cutáneo.
En un principio es común que se les noten más las bolsas y ojeras, mientras que, a largo plazo, acelera la degeneración de las células y daña su capacidad para regenerarse.
Con el paso del tiempo el cutis luce intoxicado, opaco y con problemas en su producción de aceites naturales.
4. Cuídate del sol Los rayos ultravioleta del so l están en uno de los primeros lugares de causas de envejecimiento prematuro e imperfecciones.
Éstos son bastante agresivos con la superficie de la piel y, poco a poco, la van deteriorando hasta hacerle perder cantidades significativas de colágeno y elastina.
La exposición continua al mismo puede ocasionar quemaduras graves y cicatrices difíciles de borrar.
Es primordial utilizar un protector solar con un FPS adecuado para tu tipo de piel, incluso en los días nublados.
5. Disminuye el estrés
El estrés se ha catalogado como uno de los peores enemigos de la piel saludable y joven. El cortisol que se libera ante esta reacción del cuerpo está vinculado con el deterioro de la dermis y la aparición de arrugas.
Se recomienda la práctica continua de yoga, ejercicio y meditación para disminuir los continuos episodios del mismo.
6. Practica actividad física Más allá de controlar el estrés y la ansiedad, la actividad física regular contribuye a estimular la regeneración celular y la eliminación de las toxinas.
Los ejercicios aumentan la sensación de bienestar y disminuyen la presencia de impurezas para evitar el acné y taponamiento de los poros.
7. Incrementa el consumo de agua
El consumo diario de agua es un requisito imprescindible para evitar las arrugas tempranas y otras condiciones cutáneas.
El organismo está compuesto en gran parte por este líquido vital y la deshidratación acarrea una serie de riesgos tanto estéticos como de salud.
Con el fin de mantener alejado el envejecimiento se recomienda ingerir, por lo menos, 8 vasos de agua al día, incrementándolo durante los días de entrenamiento físico.
8. Remedios caseros para las arrugas A pesar de que en el mercado existen múltiples cremas, tratamientos y técnicas contra las arrugas, en este caso proponemos algunos remedios alternativos y económicos.
La ventaja es que son libres de químicos y pueden utilizarse todos los días a modo de prevención.
Éstos incluyen:
Aceite de coco Manteca de karité Aceite de aguacate Aceite de semillas de uva Agua de rosas Aceite de oliva Aceite de jojoba