AM Hay signos de alerta que pueden ser indicio de la presencia de tumoraciones en el seno. No obstante, una revisión clínica regular y el autoexamen aseguran un diagnóstico temprano.
Puerto La Cruz.- Cada día en Venezuela se detectan nueve casos nuevos de cáncer de seno, una cifra poco alentadora pero que sirve de advertencia para que las mujeres se pongan al día con sus chequeos médicos y se realicen con regularidad el autoexamen de las mamas.
De eso trata el mensaje que promueve la fundación SenosAyuda, capítulo Anzoátegui, a través de talleres y charlas educativas, y aún más hoy, cuando se celebra el Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Seno.
Según estadísticas de la Sociedad Anticancerosa de Venezuela, esta es la segunda causa de muerte en mujeres mayores de 45 años. Anualmente fallecen unas 1.400 féminas por esta enfermedad.
Sin embargo, cuando se detecta en una etapa temprana, hay entre 60 y 80% de posibilidad que la paciente conserve el seno, y entre 90 y 97% de las afectadas salvan su vida.
Zulmary Hernández, quien hoy en día está curada y es voluntaria de SenosAyuda, junto Miguel Bracho, médico oncólogo, explicaron que entre los factores de riesgo que existen para que aparezca una tumoración en la mama está la carga genética, sexo, edad de la persona, menstruación, embarazo, no lactancia, antecedentes por tumores, obesidad, alto consumo de alcohol y cigarrillos, uso no controlado de hormonas (anticonceptivos y terapia de reemplazo), radiaciones y el sedentarismo.
Y estos factores no sólo inciden en la mujer. Se ha detectado que en los hombres, el porcentaje de aparición de cáncer de mama es de 1%, comparado con la población femenina afectada.
Síntomas más comunes
Cuando aparece una tumoración hay ciertos signos de alerta que se deben tomar en cuenta a la hora de hacer un diagnóstico.
“Es importante que la mujer conozca bien sus senos, como es la textura de la piel, su color, porque cualquier alteración puede ser un signo de alerta”, explicó Hernández.
Entre los síntomas a observar están una dureza, masa, abultamiento o tumoración palpable; inversión o descamación del pezón; alteración del tamaño y forma del seno; cambios en la piel de la mama; secresión espontánea en el pezón; microcalcificaciones y densidades asimétricas, las cuales se observan a través de la mamografía.
Lo importante es realizarce una revisión clínica frecuente, pruebas diagnósticas (mamografía, ecografía, resonancia magnética, biopsia), y el autoexamen.
El Dr. Bracho destacó que, aunque no hay una vacuna para prevenir el cáncer, un diagnóstico precoz es lo más efectivo para tratarlo a tiempo. “Una célula puede reproducirse sin control, por eso es importante la regularidad de los estudios médicos sin saltarse ninguno, porque el próximo puede venir con una sorpresa”.