CIUDAD DE MÉXICO (10/OCT/2015).- La trombosis o formación de coágulos en las venas y arterias puede producir infartos cerebrales y cardiacos, así como tromboembolias pulmonares y aunque es prevenible, se estima que la mitad de los pacientes no recibe los cuidados necesarios.
Con motivo del Día Mundial contra la Trombosis , que se celebrará el 13 de octubre, se entrevistó al jefe de la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Español y colaborador del estudio Endorse, doctor Ricardo Martínez Zubieta.
El Endorse es un estudio sobre el riesgo de enfermedad tromboembólica venosa y profilaxis antitrombótica en los pacientes ingresados en hospitales.
El especialista explicó que la trombosis, que se clasifica como una enfermedad, se presenta con frecuencia en personas que reciben quimioterapia o están internadas sin moverse en un hospital.
Consiste en la formación de un trombo o coágulo en las venas por alguna condición patológica y puede manifestarse con consecuencias leves hasta muy graves e incluso derivar en la muerte .
También puede generar el síndrome postrombótico en las piernas, que merma la calidad de vida de manera considerable.
Martínez Zubieta indicó que la trombosis «es altamente prevenible, pero en muchas ocasiones puede ser fatal, por ejemplo cuando causa embolias pulmonares, coágulos en el cerebro o infartos en el corazón».
El riesgo tampoco es igual para todos. «Si la persona está en una unidad de cuidados intensivos inmovilizado, con respirador, con un catéter en alguna vena importante y, además, algún proceso infeccioso o inflamatorio y antecedentes de cáncer, la posibilidad es muy alta: de 60 a 80 por ciento», expuso.
El especialista en medicina del enfermo crítico mencionó que muchos doctores desconocen el problema, por lo cual casi la mitad de los pacientes en riesgo no recibe el tratamiento preventivo necesario llamado profilaxis.
Esas medidas varían según el riesgo de los pacientes. Por ejemplo, a un joven de 18 años a quien operan del apéndice sólo basta con que se ponga de pie y se mueva lo más pronto posible después de la operación.
El riesgo va creciendo con la edad y otros factores, como estar bajo tratamiento de estrógenos, ingerir anticonceptivos o padecer cáncer.
Para casos más riesgosos se utilizan medicamentos, medias de compresión graduada o equipos neumáticos intermitentes. Sobre este punto advirtió que los vendajes comunes no funcionan correctamente para prevenir la formación de coágulos.
«Muchos médicos desconocemos el problema y no iniciamos las medidas necesarias para evitarlo. Hay guías internacionales pero simplemente no se conocen, no hay preparación, creemos que lo sabemos todo pero la medicina tiene muchas áreas y no recurrimos a los colegas que saben más del tema», lamentó.
Ricardo Martínez subrayó que la solución es más educación e información para médicos, enfermeras y pacientes, para lo cual sirven efemérides como el Día Mundial contra la Trombosis.