Si eres un habitual de las salas de musculación probablemente hayas oído hablar de la glutamina, un producto habitualmente utilizado para la reponerse de entrenamientos intensos donde los músculos acaban muy castigados (levantamiento de pesas, maratón, rutas ciclistas…). Lo que quizá no sepas es qué es la glutamina.
La glutamina es un aminoácido, componente habitual de las proteínas , no esencial. Esto no quiere decir que no sea necesario o importante, sino que el propio organismo, en condiciones normales, es capaz de sintetizarlo a partir de otras moléculas disponibles. Pero esto, en condiciones normales, ya que existen algunas circunstancias que pueden forzar una mayor necesidad de este nutriente y entonces el organismo no es capaz de fabricar toda la cantidad que se demanda. Una de estas circunstancias, como decíamos, es la práctica de deporte intenso y frecuente, pero no la única.
Situaciones de malnutrición donde exista un bajo tono muscular, procesos patológicos que hacen que se consuma mayor cantidad de energía en forma de proteína ( quemaduras , injertos, procesos oncológicos, infecciosos, traumatológicos, quirúrgicos…). Incluso periodos de grandes restricciones dietéticas, ya sean involuntarias por baja disponibilidad, como voluntarias por dietas hipocalóricas mal planteadas, pueden hacer que, si el organismo no dispone de hidratos de carbono suficientes para conseguir energía, lo haga a partir de proteínas que, en principio no deberían ser destinadas a ese fin.
Una de las funciones características de las proteínas es la de formación de nuevos tejidos y regeneración de los ya existentes, por eso es tan fundamental en etapas de crecimiento, desarrollo y recuperación de heridas o cicatrizaciones. En estas situaciones donde la demanda de glutamina es mayor que la síntesis endógena o interna de la misma, este aminoácido se considera semi-esencial.
Además, en concreto, la glutamina está muy presente en los músculos del organismo, tanto es así que más de la mitad de la glutamina se encuentra formando parte de la composición muscular. Pero no es el único órgano donde podemos encontrar glutamina, ya que también hay cantidades importantes en la sangre , en el cerebro o en los pulmones , entre otros.
La glutamina podemos encontrarla en alimentos ricos en proteínas tanto de origen animal como vegetal, y en suplementos a base de concentrados de glutamina .