Opciones para darle sabor a tu vida sexual hay muchas y la ropa interior comestible es una de ellas porque aunque no es tan reciente, sigue estando vigente como uno de los artículos más vendidos en lassex shops en sus múltiples sabores: caramelo, chocolate, fresa, etc. Algunas parejas aman estos ?dulces conjuntos? y otras los odian, pero definitivamente no puedes quedarte sin probar para que juzgues la experiencia por ti misma.
Datos curiosos
Están hechas de saborizantes artificiales y caramelo derretido de tal forma que se le puede dar la forma deropa interior.
Fueron inventadas en 1975 por Lee Brady y David Sanderson cuando formaron la compañía Cosmorotics.
Su primer nombre comercial fue Candypants (calzones de caramelo), y al inicio sus creadores tuvieron problemas para registrar la patente porque la Oficina de Patentes en EU veía incompatible el términocalzones con caramelo.
La ropa interior comestible fue considerada por la revista estadounidense People como una de las 434 cosas que definieron la cultura pop.
Pros
Pueden agregarle picante a tu vida sexual.
Son fáciles de conseguir porque casi en cualquier sex shop las consigues.
Hay variedad de sabores: chocolate, fresa, vainilla, etc.
¡Puedes hacer tu propia pieza de lencería comestible! Las instrucciones de cómo hacerla vienen en este video:
Contras
No hay muchas tallas disponibles, de hecho NO hay tallas disponibles, por lo que aunque la prenda es ajustable puedes tener complicaciones.
Algunos consumidores describen el sabor de la tanga comestible como “asqueroso”, por lo que su sabor queda en veremos dependiendo la marca que se compre.En el mismo sitio, los voluntarios pusieron como una de sus desventajas el que el producto se te queda pegado en los dientes cuando tratas de comerlo, lo cual en lugar de encender el momento puede apagarlo por completo.
No nos vamos a poner gráficas pero si se te pega en los dientes, significa que también se puede pegar en otras partes. Por otro lado, sabemos que cualquier cosa que altere el PH de la vagina puede ocasionar una infección, por lo que hay que tener mucho cuidado para que esto no ocurra.
La conclusión es sencilla: si tienes ganas de probarla, hazlo pero siempre cuidando tu salud femenina; incluso si quieres sentirte más segura al usarla, consulta previamente a tu ginecólogo.
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