Ellos quieren verse bien, son vanidosos y al mirarse al espejo también encuentran detalles que buscan mejorar. Compran cremas para cuidar su piel, asisten al gimnasio, se hacen cirugías estéticas y llevan una vida saludable.
Más que un elemento de atracción, el cuidado del aspecto físico va ligado a sentirse bien con uno mismo, por ello es que cada vez más hombres se preocupan por preservar su apariencia, en particular los ejecutivos que desean proyectar mayor seguridad y confianza.
Este mercado al alza en México ya no es exclusivo de las mujeres. Los varones quieren mejorar detalles para también comunicar una imagen fresca y renovada. En los pasillos del supermercado ya hay un área especial con productos dirigidos a los caballeros que ya no se limitan a desodorantes, rastrillos y espuma para afeitar. Las marcas ya han creado artículos especiales para ellos.
El valor de la industria de la belleza en el país es de 10,000 millones de dólares, de los cuales 3,000 mil millones pertenecen a productos para el público masculino, según datos de la Cámara Nacional de la Industria de Productos Cosméticos (Canipec).
De hecho, de los productos de belleza disponibles en el mercado mexicano, 70% son para las mujeres y el resto para los hombres. Asimismo, el Inegi indica que 7.3% de los ingresos familiares se destina a la compra de artículos para la higiene personal.
«Es una industria que ofrece muchas opciones al momento de consumir. Al salir de casa en promedio usamos entre seis y ocho productos en higiene personal, tanto hombres y mujeres», dice Giselle Segovia Ramos, directora de Relaciones Institucionales de la Cámara.
Explica que en los últimos 10 años, ha surgido un cambio cultural ya que el hombre consume con más frecuencia productos para mejorar su aspecto personal.
«Arrancó este interés en Europa, pero en América Latina es una tendencia que va al alza. La adquisición de productos de higiene y cuidado personal para caballeros creció de 8.5% a 9.8% de 2009 a 2014. Tan sólo el año pasado, aunque fue complicado en términos económicos, la venta de estos productos tuvo un avance de 3.5 por ciento».
Vanidad omnipresente El estudio «Vanity Capital: The global bull market in narcissism», elaborado recientemente por Bank of America Merril Lynch para conocer las tendencias en consumo de artículos o servicios de lujo relacionados con la apariencia y el prestigio social, indica que este mercado a nivel mundial tiene un valor de 3,7 billones de dólares, un equivalente al Producto Interno Bruto de países como Alemania.
Además, cálculos del banco arrojan que esta industria podría alcanzar una cifra de 4,5 billones en 2018.
¿Qué hace crecer la vanidad? El documento indica que una serie de factores influye como, el cambio de hábitos en los hombres, la creciente clase media, el retraso en la edad para casarse y hasta las redes sociales «hacen omnipresente la envidia y el narcisismo» e impulsan industrias como la textil y la cosmética.
El estudio también señala que de acuerdo con un sondeo, 40% de los jóvenes de entre 25 y 35 años emplean algún tipo de cuidado contra el envejecimiento.
María Calderón, directora adjunta de Nahia Institute, instituto de medicina estética ubicado al interior de Saks Fifth Avenue Polanco, dice que las mujeres continúan a la cabeza en el mercado, pero los hombres muestran un claro interés en el cuidado de su aspecto.
Destaca que un factor que interviene en querer mejorar su imagen, además del tema de la vanidad, es que los divorcios los colocan de nuevo en la búsqueda de una nueva pareja. El hecho de que los hombres de negocios deseen conservar una buena apariencia influye en su día a día como cerrar una negociación.
«Son las mujeres quienes nos visitan con mayor frecuencia, sin embargo, hasta la fecha la afluencia de los hombres es de 35 por ciento. Cada vez hay más divorcios, eso hace que el hombre intente tener parejas más jóvenes y busca verse mejor», dice Calderón, quien asegura que en su natal España se observa un alza en el interés de los varones por no envejecer y en México no es la excepción.
Entre 2011 y 2013 hubo un aumento de 22% en los divorcios, revela el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Dedicado a consentir a sus clientes Nahia Institute ofrece una gama de tratamientos faciales y corporales para hombres y mujeres. Su oferta va desde la reducción de medidas con un cambio de hábitos saludables y aparatología hasta la aplicación de toxina botulínica. María Calderón comenta que el género masculino tiene una preocupación hacia lo corporal como bajar de peso y reducir el abdomen, aunque también desea mejorar el aspecto de su rostro.
Aunque tanto hombres como mujeres quieren lucir espectaculares y hacen lo posible para mantenerse en forma, jóvenes y atractivos, no sólo para cuidar su cuerpo sino también para conservar su trabajo y ¿por qué no? conseguir uno mejor gracias a su imagen.
Fernando Molina, médico cirujano especialista en Medicina Estética y con una maestría en Cirugía Estética, comenta que el mercado ha sufrido un cambio: hace 15 años del 100% de cirugías, 95% era en mujeres y el resto en hombres.
«Hoy ha evolucionado, 80% corresponde a ellas y el resto a caballeros. Esto por distintas variables como la apertura social que existe sobre practicarse alguna cirugía. Ha aumentado la cirugía para hombres por temas laborales, la competencia ha crecido a tal grado que la persona se vea bien, las mismas empresas fomentan la realización de estas operaciones porque una persona que se siente bien va a rendir más».
Se estima que entre 2018 y 2020, la proporción de cirugías será de 65 a 70% en mujeres y el resto en hombres.
El también presidente de Mediláser y la Academia Americana de Medicina, explica que hay empleados que tienen dismorfismo, es decir, cuando algo en su cuerpo no les gusta, pero en alto grado es patológico.
«En vez de usar el tiempo laboral para sus actividades cotidianas, el trabajador investigar cómo corregir eso que no le gusta o se lamenta y se deprime, esto significa que no va a rendir igual y no dará los resultados adecuados».
Países en busca de perfección Fernando Molina asegura que en realización de cirugías estéticas, México es el tercero en América, después de Estados Unidos y Brasil.
Menciona que estuvo de moda el turismo médico hacia Colombia, pero el gasto era mayor porque se considera el precio de alojamiento y transporte.
«Al final de cuentas es más caro, por ejemplo, una operación que aquí tiene un costo de 5,000 dólares, en Colombia puede ser de 3,500 dólares, pero si se suman los gastos por trasladarse allá, la cifra es la misma o más».
En ese sentido, abunda que para dar mayor acceso a las cirugías estéticas en Mediláser existe la opción de financiamiento hasta por 36 meses, sin consultar Buró de Crédito y sin contar forzosamente con una tarjeta de crédito, lo cual también es una garantía para el paciente y los resultados que obtiene.
Lucha contra el tiempo La prolongación de vida se ha elevado entre la población y por ello quienes tienen más años quieren alargar su juventud para retrasar al máximo el calendario.
Esta tendencia se observa en la realización de tratamientos antiedad. María Calderón comenta que la demanda actual entre los hombres de negocios es alargar la esperanza de vida, es decir, «ser longevos y sanos».
«La longevidad ha hecho que las personas se preocupen por su apariencia. Vivimos más tiempo y la calidad de cómo llegamos a cierta edad depende mucho de cómo nos cuidamos».
Comenta que el ticket promedio que desembolsa el género masculino por un tratamiento en el instituto de belleza es de 10,000 pesos, esto para un mes y medio, mientras que los paquetes van desde los 5,000 a los 30 mil pesos.
El médico Fernando Molina indica que las principales cirugías que se realizan los hombres son injerto de cabello, rinoplastia, la blefaroplastia (operación que mejora la apariencia de los párpados), la liposucción con láser, quitar glándulas de Bichat (extracción de grasa de las mejillas) y los tratamientos faciales.
Un paciente se gasta en promedio entre 40 mil y 50 mil pesos en cada operación estética; las técnicas de rejuvenecimiento van desde 25 mil hasta 70 mil pesos, pero depende porque las valoraciones son individuales.
En cuanto a los perfiles, el presidente de Mediláser destaca que varían las necesidades y las edades. Por ejemplo, en jóvenes de 15 años en adelante es común la ginecomastia, es decir, disminuir el tamaño de glándulas mamarias en caballeros, ya que esto puede ser un factor que detone el bullying.
«Los hombres entre 20 y 30 años se inclinan por la operación de nariz, y después de esta edad empiezan con alopecia y requieren injerto de cabello; mientras que entre los 40 y 50 años quieren de una liposucción».
La idea es practicar operaciones cada vez menos invasivas, como en esta última cirugía en la que ya es recomendable el uso de láser y no la cánula tradicional, lo que permite una recuperación más rápida, entre otras ventajas.
La recomendación del profesional es que los interesados en someterse a una, verifiquen que el médico cuente con mínimo dos cédulas profesionales, eso pueden hacerlo en la página de la Dirección General de Profesiones.
Otro consejo es que comprueben la legalidad de las instalaciones de la clínica y con los permisos a la vista, deben estar autorizadas por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Practicidad y sencillez Los cosméticos más vendidos en el mercado mexicano son aquellos que se destinan al cuidado del cabello, cuidado de la piel y perfumes, indica el estudio «El mercado de la cosmética y perfumería en México 2013», elaborado por ICEX España Exportaciones e Investigaciones.
En la categoría masculina no es la excepción. El documento detalla que los caballeros retrasan su paternidad y su poder adquisitivo se eleva a ciertas edades, esos elementos provocan que ellos «hagan las compras el súper» y la venta de productos para su cuidado personal vaya en aumento.
«Ellos buscan productos sencillos de aplicar y que sean multifuncionales por el ritmo de vida tan apresurado. El roll on por ejemplo, ofrece practicidad. Más allá de la marca, escogen lo que mejor les funcione en rapidez, aunque el aroma también es importante», indica Giselle Segovia Ramos.
Debido a un cambio de hábitos, ya no sólo se preocupan por estar afeitados. La tendencia es estar al tanto de su piel, uno por el tema de envejecimiento y por la sensibilidad, además de que se inclinan por la compra de productos específicos para el género masculino como los shampoo anticaspa y los que evitan la caída del cabello, así como los tintes para cubrir las canas, todo, con tal de lucir mejor.
«Las principales novedades que presentan las marcas para atraer al hombre a su consumo, se centran en señalar que son productos hechos a medida, para distintos tipos de piel y edades, así como los productos 2×1, que faciliten el proceso de compra al hombre y sean más sencillos de usar», dice el estudio de ICEX España Exportaciones e Investigaciones.
Las soluciones a la medida abundan en el mercado, es una oferta que se va perfeccionando de acuerdo con las exigencias de hombres y mujeres, a quienes no les basta la perfección sólo interior para tener una apariencia adecuada.