8 cosas que pasan cuando finalmente dejas de tomar café

1. Te sentirás terrible (por un rato)

Si alguna vez has pasado muchas horas sin una dosis de cafeína, seguramente has sentido fatiga, dolores de cabeza y algunos fuertes cambios de humor, dice Wesley Delbridge, portavoz de la Academia de Nutrición y Dietética. Incluso recomienda decirle a sus amigos y familiares que estás dejando la cafeína antes de empezar para que sepan por qué estás tan irritable.

Si bien con cada persona es diferente, si estás ingiriendo más de 400 o 500 ml de cafeína por día (alrededor de tres o cuatro tazas de café, seis tazas de té o 10 latas de refresco), es probable que sientas un bajón como uno de los efectos. Estos suelen durar de 7 a 10 días, pero puedes reducir al mínimo sus efectos si te desintoxicas de cafeína gradualmente, como cuando dejas de fumar. Cada dos o tres días, recorta tu consumo sólo un poco. Bebe solo la mitad de una taza de té o mezcla el café regular con el descafeinado.

2. Perderás peso

No creo que una persona promedio se de cuenta de cuántas calorías está consumiendo con sus bebidas con cafeína. Seguramente sabes que el refresco está cargado de azúcar y las bebidas con mezclas de café son bombas para aumentar de peso, pero con un poco de crema y azucar en tu taza de café fácilmente podríamos estar hablando de más de 200 calorías por porción. Analízalo un poco en el transcurso del día y verás cómo renunciar a las bebidas con cafeína podría ayudarte a bajar de peso.

3. … O lo ganarás

La cafeína es un fuerte supresor del apetito. Naturalmente te sentirás con más hambre mientras la dejas. Además, de acuerdo a la Mayo Clinic, la cafeína puede aumentar tu metabolismo. El efecto es pequeño, pero si tomas tu café negro, estás quemando más calorías de las que contiene, lo que implica que te ayudará a perder peso.

4. Dormirás mejor y tendrás más energía

Un poco de cafeína, incluso seis horas antes de que vayas a la cama, puede interrumpir tu sueño esa misma noche. El efecto: te despiertas más cansado y con la necesidad de consumir más cafeína. El ciclo continúa. Por eso la gente que deja por completo la cafeína duerme más profundo y mejor que aquellos que beben así sea sólo un poco de café. Ahora, lo más probable es que te sientas cansado mientras tu cuerpo se ajusta a un estilo de vida libre de cafeína. Pero a largo plazo, tendrás más energía de la que obtendrías de cualquier espresso.

5. Te sentirás con más calma

La cafeína es un estimulante, libera adrenalina, lo que implica que presiona el acelerador de tu sistema nervioso y te pone en una situación de luchar o huir. Además, debido a que también es un vasoconstrictor, estrecha tus vasos sanguíneos y eleva tu presión arterial. Deshazte de la cafeína y te sentirás menos ansioso y estresado.

6. Tus entrenamientos sufrirán

Ese modo de luchar o huir, sin embargo, te viene muy bien cuando estás a punto de correr una carrera o iniciar un entrenamiento. El Colegio Americano de Medicina del Deporte dice que la cafeína mejora el rendimiento y la intensidad del ejercicio. Y como bien sabes, llevarlo al límite es clave para obtener los mejores resultados en tus entrenamientos.

7. Tu panza será más feliz

Las coffee poops son una amenaza real presente en todos los amantes del ejercicio. Eso es porque, aparte del hecho de que la cafeína acelera tu sistema digestivo, el café es muy ácido, lo que puede poner en riesgo tus carreras. Básicamente, eliminar la cafeína de tu dieta hará mucho para evitar los viajes de emergencia al baño.

8. Perderás antioxidantes

El café es la principal fuente de antioxidantes en una dieta promedio, lo que podría explicar por qué un estudio publicado en Breast Cancer Research se encontró que las mujeres que beben cinco o más tazas de café al día son 57 por ciento menos propensas a desarrollar cáncer de mama que los que beben menos de una taza al día. Y un reciente estudio de la revista American Journal of Epidemiology descubrió que el consumo de tres a cinco tazas de café al día reduce en un 21 por ciento el riesgo de morir por alguna enfermedad cardiaca. Mientras que el té verde es una de las fuentes más ricas en antioxidantes. Así que si estás cortando el café y el té, sería una buena idea comenzar a aumentar tu consumo de frutas y verduras.

 

Cosmopolitan