El desayuno ideal consiste en combinar frutas, una fuente de proteína como huevo o queso, y una fuente de carbohidratos. De preferencia evite las comidas o meriendas que contengan un alto contenido de azúcar, conservantes y colorantes, estos no aportan ningún beneficio nutricional que valga la pena a los niños más allá de su dulce sabor. El desayuno de los niños debe incluir nutrientes que contengan hierro, zinc y calcio.

Algunas recetas que le puede interesar:

• Fruta, leche y cereales.
• Bol de yogurt natural con fruta en trozos y algunos frutos secos.
• Tostadas (de pan integral) francesas con huevo y alguna fruta.
• Crepes con fruta y leche.
• Galletas caseras.

Preparar las cosas por usted mismo hará que tenga mas control de lo que su niño come, consulte con su pediatra sobre las porciones ideales para su pequeño. Intente mantener un hábito de hidratación también. Vaya por la porción de la fruta en vez de los jugos, ya que estos suelen perder mucha cantidad nutricional al ser batidos o procesados, incluso si son caseros.

Para que los niños se mantengan sanos y fuertes, es recomendable realizarle un desayuno saludable el cual debe ser completo y equilibrado ya que este ayuda a que tengan un crecimiento y desarrollo sano.

La dieta adecuada para los niños puede contener:

Frutas y verduras: las cuales deben ser de colores variados.

Carbohidratos complejos: como estos se descomponen más lentamente proporcionan energía duradera durante el día.

Proteínas: se encuentran en una gran variedad de alimentos tanto de origen animal como vegetal.