El aumento del grosor del corazón (miocardiopatía hipertrófica) es uno de los males que puede manifestarse con una muerte súbita. Un simple electrocardiograma permite detectar esta enfermedad y prevenir complicaciones.

El departamento de Cardiología del Hospital de Clínicas no ocultó su preocupación por los últimos casos de muerte súbita que se han registrado, principalmente en jóvenes.

Llevar un estilo de vida saludable y someterse a los chequeos al menos una vez al año, podrían marcar la diferencia a la hora de prevenir una tragedia.

La miocardiopatía hipertrófica, que consiste en el aumento del grosor del corazón, puede generar arritmias en altos porcentajes y desembocar en una muerte súbita si no se detecta a tiempo.

«Recomendamos los chequeos médicos habituales desde la niñez, porque como esto es un problema congénito que en nuestro país va en aumento, significa que no es detectado a tiempo y muchas veces terminan o debutan como muerte súbita», comentó la doctora María Paniagua, doctora del Departamento de Cardiología.

Si bien el examen físico y algunas manifestaciones que llaman la atención del médico indican una sospecha de esta enfermedad, el método más certero es el electrocardiograma.

Para que ocurra una muerte súbita, necesariamente tuvo que haber existido un «gatillante» que haya generado arritmias a causa de algún esfuerzo físico o golpe en el pecho, o también, por el consumo de algún estimulante como el alcohol o sustancias alucinógenas.

Lo primordial es acudir a consulta antes de que aparezcan los síntomas, pues cuando se ven las primeras señales generalmente ya resulta muy tarde, dado que llegan con un infarto, un derrame cerebral, una insuficiencia cardíaca o renal.

La profesional instó a no pensar que este tipo de males afectan solamente a las personas adultas y pidió tomar todas las precauciones. Son varios los casos que se registraron este año en poco tiempo.

Algunos de ellos son: la muerte súbita del joven arquero de Sport Colombia , la del chico que falleció en la práctica de Taekwondo, la de un cadete en la pista de entrenamien to, la de una mujer de 50 años en un motel , la de un hombre de 32 años, también en un reservado y la de un joven de 21 años en una discoteca.