Las sopas tienen mayor consistencia y un ingrediente clave: la fibra que, además de ayudar a eliminar la grasa del cuerpo, da saciedad, según explica Karla Gutiérrez Ramírez, nutricionista de la Clínica Javier Prado, Perú.

Esta tendencia aparentemente nació el año pasado en Los Ángeles, y ya se ha extendido por Estados Unidos y Europa. «Si bien estas sopas pueden ser parte de una dieta hipocalórica, tenemos que estar asesorados para ver en qué momento del día se consume y qué cantidades», añade Gutiérrez. «Cada persona tiene distintas necesidades según su tasa metabólica basal».

La mayoría de estos paquetes diarios tiene un promedio de 1.200 calorías, con las cuales se garantiza una sustancial pérdida de peso, piel más brillante, mayor energía y vitalidad. La página web de «Soupure», un negocio de ‘souping’ estadounidense, menciona además disminución de problemas gastrointestinales, mayor defensa del sistema inmunológico, y limpieza del estómago y colon.

Los defensores del «juicing» opinan que al cocinarse, las verduras y frutas pierden una buena parte de sus vitaminas y minerales; los especialistas los avalan ya que las vitaminas hidrosolubles, como la C y el complejo de vitamina B, son sensibles al calor.

Para garantizar que las sopas que consumimos aporten la mayor cantidad de nutrientes, el licenciado Christian Casella Gonzales, supervisor de nutrición de la Clínica San Felipe, en Perú, recomienda añadir vegetales de distintos colores, alguna fuente de proteína (como claras de huevo, pollo, pescado o carne) y, para que resulte más contundente, una fuente de grasa (como aceite de oliva, frutos secos, ajonjolí, etcétera).

Adicionalmente, sugiere que una manera de prevenir que las verduras pierdan sus propiedades nutricionales es evitando recocinarlas.

«Antes de seguir una tendencia que promete rápidos resultados para bajar de peso o limpiar el organismo, como el «souping», uno debe informarse adecuadamente para conocer sus ventajas y sus desventajas», explica la nutricionista Jackelyn Friedman.

«Al ser regímenes muy restrictivos, que tienen poca variedad de nutrientes y escaso aporte de energía, podrían producir fatiga, niveles bajos de glucosa en la sangre, dolores musculares, mareos y náuseas».

24 horas de sopa:

Mientras esperamos que la tendencia llegue, podemos seguir el formato de un día de «souping» de la empresa estadounidense Soupelina:

– Desayuno: crema de auyama

– Media mañana: consomé de vegetales

– Almuerzo: crema tailandesa de camote y coco

– Media tarde: consomé de vegetales

– Cena: sopa de lentejas

– Fuera de eso, solo se puede tomar agua o infusiones, mientras dure el proceso de desintoxicación.

Las dietas ‘detox’ o depurativas son intervenciones a corto plazo diseñadas para eliminar las ‘toxinas’ del cuerpo, promover la salud y asistir con la pérdida de peso. Así empieza un artículo publicado en diciembre pasado en la revista científica Journal of Human Nutrition and Dietetics .

Este indica que, a pesar de su popularidad, estos regimenes alimenticios no definen claramente el término ‘toxina’, por lo que no se sabe exactamente qué se pretende remover del cuerpo ni los mecanismos a través de los cuales se haría, lo que dificulta comprobar su eficacia científicamente.

¿DE QUÉ SE TRATAN?

Una simple búsqueda en Internet revela innumerables tipos de dietas ‘detox’.

Cada cual promete beneficios distintos a la salud, producto de la eliminación de toxinas del cuerpo, desde mejorar el sistema digestivo y la piel, hasta limpiar el hígado y los riñones, estimular el metabolismo y promover la pérdida de peso.

Como no están basadas en parámetros específicos como las Atkins o South Beach, la variedad de opciones es infinita. Sin embargo, por lo general estas restringen varios grupos alimenticios como ‘carbohidratos, proteínas y grasas y se enfocan exclusivamente en el consumo de frutas, vegetales, nueces, tés herbales y semillas’, explica Verónica Hidalgo, Nutricionista-Dietista de la Asociación Panameña de Nutricionistas-Dietistas (APND).

Dentro de estas dietas se encuentran también las de jugos o batidos preparados con frutas, vegetales, hierbas y semillas, ‘sustituyendo completamente las principales comidas por varios días’, agrega Gary Sánchez, Nutricionista-Dietista de la APND.

Algunas funcionan a base de ayunos, laxantes, diuréticos, vitaminas, minerales, suplementos herbales o ‘alimentos depurativos’, sin mayores explicaciones científicas en cuanto a su utilidad.

¿BENEFICIO O PERJUICIO?

Tanto Hidalgo como Sánchez coinciden en que el único beneficio que se le puede atribuir a este tipo de dietas es el aumento en el consumo de frutas y vegetales, pues numerosos estudios relacionan su ingesta con mejores marcadores de salud.

‘Son fuentes de antioxidantes, vitaminas, minerales, agua y fibra’, expresa Hidalgo. ‘Ejercen efectos protectores en el cuerpo, principalmente combatiendo radicales libres y células cancerosas’.

De igual manera, a mayor ingesta de frutas y vegetales, menor consumo de alimentos de alta densidad calórica y poco valor nutritivo, como lo son los dulces, frituras, harinas y productos procesados, lo que permite una mejor salud.

‘Por tanto, tiene más importancia lo que se omite que lo que se toma’, indica Sánchez. Las dietas que prometen depurar el organismo ‘son ineficaces, nos alejan de una dieta saludable y pueden suponer un riesgo para la salud’, admite, por llevarnos a un déficit calórico y a la restricción de nutrientes.

Las que promueven los ayunos ‘pueden deshidratarnos, debilitar el sistema digestivo, generar dolor de cabeza o bajar la presión arterial’, agrega.

Asimismo, este tipo de alimentación podría resultar en ‘pérdida de masa muscular, poniendo al cuerpo en un modo de privación… lo cual resulta en un metabolismo más lento’, añade Hidalgo.

Lo que la mayoría de estas dietas prometen ‘no son más que ‘afirmaciones sin fundamento’ ni bases científicas que las respalden’, considera Sánchez.

Si bien existen numerosos testimonios positivos de personas que han intentado estas dietas, esto está vinculado a la restricción de alimentos procesados altos en grasas saturadas y azúcares simples, lo cual promueve una mejor salud de por sí.

EL CUERPO ES LA MEJOR HERRAMIENTA

Sánchez señala que ‘ desintoxicar’ es el proceso que permite eliminar sustancias nocivas del organismo, como los narcóticos, por lo que el ‘detox’ o sus sinónimos, como ‘depurar’ o ‘limpiar’ son términos ‘ambiguos que realmente no corresponden a procesos fisiológicos reales en nuestro organismo’.

‘El cuerpo humano es un gran filtro que sintetiza y excreta las sustancias nocivas que entran en él… a través del hígado, los riñones, el sudor, las heces y la orina’.

En otras palabras, nacemos equipados para depurar a diario, sin la necesidad de hacer dietas especiales.

Tanto Hidalgo como Sánchez recomiendan enfocarse en los estilos de vida y alimentación saludables.

‘Lo que se recomienda para la población en general es consumir una variedad de alimentos en cantidades adecuadas, ya que cada alimento ejerce sobre nuestro organismo una función específica. Las restricciones de alimentos nunca son buenas’, revela Hidalgo.

‘Si usted está sano, concéntrese en dar a su cuerpo lo que necesita para mantener robusto su sistema de auto-limpieza: una dieta saludable, una ingesta adecuada de líquidos, el ejercicio regular, dormir lo suficiente, y llevar sus controles con un médico o nutricionista idóneo’, concluye Sánchez.

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‘Las dietas que prometen depurar el organismo son ineficaces, nos alejan de una dieta saludable y pueden suponer un riesgo para la salud’

GARY SÁNCHEZ

NUTRICIONISTA-DIETISTA