1.- Usar la bicicleta se trata de una actividad cardiovascular que ayuda a aumentar la capacidad pulmonar, disminuye la presión sanguínea y mejora la circulación de la sangre ayudando a mejorar nuestra resistencia y nuestro estado de salud.

2.- No hay otro deporte que te permita estarlo practicando con el mínimo cansancio mientras que tu cuerpo está quemando calorías y al mismo tiempo fortaleciendo músculos específicos, no solo de las piernas, sino de los antebrazos, pectorales y dorsales.

3.- Si nuestro objetivo es perder peso, la bici debe ser una gran opción deportiva. Las personas con un peso elevado o ligeramente superior a lo recomendado, deben elegir un deporte que no genere estrés ni sobrecargue las articulaciones.

4.- La bicicleta también está indicada para todas aquellas personas con problemas articulares o ligamentosos, con signos de artrosis, desviaciones en los ejes de las piernas o alteraciones al caminar.

5.- Podemos añadir esta actividad a nuestra vida cotidiana sin necesidad de modificar demasiado nuestros hábitos: podemos ir al trabajo, a la escuela, de compras, etc.

6.- Como toda actividad física, montar en bici también segrega endorfinas, moléculas de felicidad, lo que genera optimismo y una actitud más vital y positiva.

7.- Recuerda, cada vez que salgas a pasear en bici no olvides utilizar protección para que disfrutes por completo tu paseo: el uso de casco, luces, timbre y la selección de las vías por donde será tu recorrido, no deben de faltar.

Todo esto es indispensable para que la convivencia con los automovilistas sea segura y respetuosa.