Karla Valladares, coordinadora del programa en el ambulatorio de La Guaira, audióloga y terapista del lenguaje, señaló que un diagnóstico antes de los cinco años , puede ayudar a recuperar completamente la audición del paciente.

Indicó la especialista que cuentan con un equipo y personal capacitado para la atención de pacientes con pérdidas de la audición y patologías del oído, sea por herencia o por exposición al ruido. Atienden desde niños recién nacidos hasta  abuelitos de 90 años. 

«Los niños al nacer y hasta los dos meses, se les hace una audición otoacústica , la cual proporciona un mayor conocimiento de la deficiencia auditiva y las nuevas posibilidades para la intervención y el tratamiento temprano. Si el oído no responde a los estímulos se le hace un Baby Scream «, dijo Valladares.

Indicó que la pérdida de la audición se determina por decibeles, cuando un niño sale positivo en el Baby Scream, se le realiza una estimulación que llega al Sistema Nervioso Central, lo cual hace que se recanalicen las neuronas y luego el pequeño puede escuchar. A partir de los seis años y en los adultos se les hace una audiometría tonal. Las consultas son de lunes a viernes .

En Vargas hay una alta incidencia de este tipo de patología, en un estudio de 15 pacientes, dieron positivos. Las parroquias más comprometidas son Catia La Mar, Naiguatá y Caruao.   

Síntomas de la hipoacusia

  -En los bebés no existe el balbuceo y  no reacciona a los estímulos ni a los ruidos fuertes.

 -En los niños de cuatro años en adelante no emiten sonidos, presentan trastornos de conducta y un retraso en aprender a hablar. 

 -En los mayorcitos presenta una dificultad para seguir una conversación, para escuchar un ruido leve y tiene dificultades académicas.