En primer lugar, las verduras de hoja verde son una fuente antioxidante fantástica. El brócoli o las espinacas serían un ejemplo que ayudan a estimular la hidratación y la elasticidad de la piel, además de ayudar con el antienvejecimiento.

El pescado sería otro ejemplo. El salmón, las sardinas, la caballa, el atún o la trucha son fuentes de omega 3, perfectas para mantener la piel hidratada y con una mayor elasticidad, lo que ayudará a prevenir la celulitis.

Para quienes os gusten los frutos secos este os encantará: las nueces y semillas varias son ricas en vitamina A y E. Ayudan a disminuir el proceso de envejecimiento y a mantener una piel hidratada.

Los beneficios del yogurt también son muy conocidos. Por una parte, ayuda a combatir el envejecimiento prematuro de la piel y el acné, y, por otra parte es perfecto para prevenir problemas intestinales.

Los huevos son un alimento importantísimo. Ricos en vitamina B y E, ayudan a desacelerar el proceso de envejecimiento del cuerpo.

Y los tomates . Éstos actúan como bloqueadores solares naturales y ayudan a lucir una piel más joven, además que ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares.

Otro must en nuestra dieta debe ser el aceite de oliva. Éste contiene polifenoles, un antioxidante que ayuda a reducir las enfermedades del corazón. También contiene vitamina A y E, que ayudan a mantener una piel saludable.

Finalmente, te traemos el alimento estrella: el chocolate negro. Éste ayuda a humectar la piel, a reducir en enrojecimiento y la aspereza. Además, ayuda a combatir la falta de sueño, la fatiga y los efectos del envejecimiento.

¿Qué os parece esta manera de cuidar la piel? ¿Es sencillo, no? Solamente debéis incorporar algunos de estos alimentos a vuestra dieta diaria y… ¡Voilà! Tendréis una piel fantástica. Nosotras ya lo hemos hecho. ¿Y tú?

Nosotras