Inicialmente se trata de tener como base un alimento rebanado finamente y mezclado con algunos ingredientes como el limón y el aceite de oliva para resaltar sabores. Al principio se elaboraba solo con carne buey, pero ya se sabe que hoy se puede encontrar se pescado, mariscos, moluscos e incluso de frutas y verduras.
Para la receta tradicional, lo más importante entonces sería adquirir carne de buey, y solicitar en la carnicería que la rebanen muy finamente, o si se tiene un buen cuchillo en casa, lo puede hacer uno mismo. Para una versión más práctica y actual puede prepararse perfectamente con lomo o lomito de res.
Ingredientes
1 kilo de buey cortado en filetes delgados
El jugo de un limón
10 cl de aceite de oliva
Sal
Pimienta
Queso parmesano
Alcaparras bebé
Hojitas de albahaca
Preparación
Se ponen las rebanadas de carne en platos grandes y se llevan al congelador por unos 30 minutos. Se preparar una emulsión con el jugo de limón y el aceite de oliva, se le agrega sal y pimienta. Se sacan los platos y se cubren las rebanadas de carne con queso parmesano.
En este punto depende del gusto del comensal, pues se puede añadir el queso rallado, pero no muy fino o se puede servir en rebanadas para cubrir la carne. Se añaden las hojas de albaca y se adereza con la emulsión preparada. Es un plato que se sirve frío, por eso es importante mantener la carne rebanada en la nevera hasta el momento que se va a preparar.
Acompañantes especiales: se pueden añadir piñones pasados por el sartén, pistachos triturados, nueces o avellanas trituradas. Igualmente, combinan muy bien los tomates secos.
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