Trombosis por el uso de anticonceptivos: ¿un riesgo real?

La Nacion / Foto: Latinstock ¿Cuáles son las probabilidades de padecer una trombosis por el uso de anticonceptivos? ¿Deberíamos preocuparnos? Es una realidad y las cifras lo confirman: más de 100 millones de mujeres en el mundo recurren a estos métodos para controlar la fertilidad y los números aumentan cuando hablamos de países desarrollados.

Hablando puntualmente de la píldora, desde su invención es un método muy popular que, si bien no previene contra las enfermedades de transmisión sexual, es altamente efectiva a la hora de evitar embarazados no deseados. Desde su invención, los especialistas de todo el mundo no dejan de trabajar en su innovación pero también continúan investigando sobre sus efectos, y también sobre sus riesgos. Ahora, un estudio realizado por Kantar TNS el mes pasado en la República Argentina, reveló que q uienes están informados sobre posibilidad de sufrir una trombosis, sólo reconocen 3 de más de 10 factores de riesgo vinculados a la patología. Padecer obesidad, haber tenido una trombosis venosa en el pasado y ser fumador son los ítems más identificados, aunque se deja de lado el hábito generalizado del consumo de anticonceptivos orales. ¿ Vos reconocías el uso de los anticonceptivos como un posible factor de riesgo de desarrollar coágulos de sangre? «Lo que sucede con este tipo de pastillas de ciertas combinaciones hormonales es que por un lado producen menos aumento de peso y otras molestias, pero por el otro aumentan el riesgo de generar trombosis, cáncer de mama, y de ovario, expresó la Dra. Vilaseca, especialista en Hematología.

PERO ¿QUÉ ES LA TROMBOSIS? Su nombre completo es trombosis venosa profunda y hace referencia a un coágulo de sangre ubicado en una vena profunda. Por lo general aparece el las piernas, pero su mayor peligro se manifiesta cuando se desprende y viaja por el torrente sanguíneo. En ese caso estamos hablando de un émbolo que, de acercarse al pulmón, se puede transformar en una embolia pulmonar. La trombosis es una de las principales causas de muerte y discapacidad en todo el mundo. Todos los años se dan 10 millones de casos en países con ingresos altos, medios y bajos pero la sensibilización pública mundial es notoriamente más baja que la conciencia sobre otras enfermedades.

¿QUÉ LA CAUSA Y CûMO SE DIAGNOSTICA? Los coágulos pueden tener una serie de causas como la inactividad o el sobrepeso. «La hospitalización y la inmovilización, ser fumador u obeso también aumentan la posibilidad de generar trombos. Además, las operaciones son otra de las principales causas de esta problemática, sobre todo cirugías relacionadas con el cáncer, la cadera o la rodilla», indica la Dra. Vilaseca. Los síntomas son, principalmente, hinchazón en una pierna, dolor o sensibilidad en el lugar de la hinchazón, aumento de la temperatura en el área sensible, y piel enrojecida o decolorada en dicho lugar.

Pero hay un dato más que nos preocupa a las mujeres y es que t enemos que ser cuidadosas en cuanto al uso de pastillas anticonceptivas ya que puede ser un disparador de una trombosis. Como la incidencia aumenta con la edad, entre los 25 y 29 años, es aproximadamente de 0.4 a 1.5 por cada 10.000 mujeres por año, y es el doble (0.6 a 3) entre los 40 y 44 años en Occidente. «La asociación entre los métodos anticonceptivos con la trombosis fue adjudicada a los estrógenos cuando a principios de los ’60 se identificaron los primeros casos y no existían las píldoras combinadas. Por ese motivo empezaron a producirse formulaciones con menor contenido de estas hormonas, pero con el tiempo se notó que los progestágenos, involucrados en las preparaciones contraceptivas más modernas, también contribuyen al riesgo de trombosis. Aun así, con un estimado de 100 millones de usuarias en el mundo, es tanto el beneficio demostrado por estos productos en relación a prevenir embarazos no deseados que con hacer una adecuada evaluación clínica y recabar la historia personal y familiar de la paciente suele ser suficiente para proteger a la población susceptible», asegura la Dra. Analía Sánchez Luceros, Jefe Departamento de Hemostasia y Trombosis de la IIHEMA, Academia Nacional de Medicina.

Entonces, la elección del tipo de anticonceptivo debe de estar individualizada según las características de la persona y sopesando la relación riesgo/beneficio que presenta el medicamento. Es decir que, al momento de que te prescriban un plan de anticoncepción hormonal, deberían hacerte una historia clínica detallada y evaluar su existen factores de riesgo que desaconsejen esa vía. ¿Y cuáles serían esos riesgos? Básicamente, antecedente de trombosis en la familia, o si hay una alteración en la coagulación de la sangre -además del tabaquismo y la obesidad-. Para el resto de casos, apuntan los expertos, no hay ninguna limitación.

En esta nota: Belleza y Salud Salud Revista OHLALÁ! LA NACION Sociedad Maternidad